De Tagliacozzo al Colle delle Finestre: descubre los puntos que decidirán el Giro 2025 | Episodio 6
Episodio 6: el Colle delle Finestre
Para el enfrentamiento final del Giro d’Italia 2025, para ese “all-in” previo a la definitiva entrega de la Maglia Rosa al día siguiente en Roma, es difícil imaginar mejor escenario que el del Colle delle Finestre. Una subida durísima, con pista de tierra incluida, que llegará después de 19 etapas de ataques, sprints, subidas y contrarreloj. Su historia es relativamente reciente: precisamente en 2025 se celebrará el 20º aniversario de la introducción de esta ya mítica ascensión en el recorrido del Giro. Fue en 2005 cuando los aficionados la vieron incluida por primera vez —también en aquella ocasión fue el último gran esfuerzo antes del final en Milán— y desde entonces ha regresado otras tres veces, en 2011, 2015 y 2018. La última vez, probablemente no hace falta recordarlo, fue la subida que abrió las puertas del paraíso a Chris Froome, quien dio allí la vuelta a la carrera para acabar ganando ese Giro.
Entremos en los detalles del Colle delle Finestre. La subida mide 18,5 km y tiene una pendiente media del 9,2%, que se mantiene muy constante durante toda la ascensión. Ya con esos datos se puede comprender la dureza del paso que une el Val di Susa con el Val Chisone, pero además están los últimos 8 km sobre carretera de tierra, que hacen aún más complicada la existencia a los corredores. En 2025, el Finestre será también la Cima Coppi del Giro, con sus 2178 metros de altitud en la cima, y se superará a 28 km de la meta, situada en Sestrière, exactamente como hace 20 años.
La etapa, de Verrès a Sestrière sobre 203 km, será una larga espera para el monstruoso Colle delle Finestre, ya que antes de la Cima Coppi 2025 solo habrá dos ascensiones relativamente suaves, como Corio (4ª cat.) y el Colle del Lys (2ª cat., 13,7 km al 4,7%). Los escapados intentarán ganar el mayor tiempo posible en la primera parte de la etapa para luego tratar de resistir al empuje de los favoritos en el Finestre, donde ya no contarán ni las estrategias ni los cálculos, sino solo el inevitable enfrentamiento directo por la Maglia Rosa… y también por la Maglia Azzurra, dado el alto número de puntos que se reparten en la pancarta del puerto. Será un espectáculo vaya como vaya, pero si la Maglia Rosa sigue aún en juego, todavía más.
El Finestre destrozará las piernas de todos los grandes favoritos, pero la etapa no terminará ahí, porque tras el descenso de 11 km, será Sestrière quien dé el golpe de gracia. La subida es bastante sencilla (3ª cat., 16,2 km al 3,8%), pero todos llegarán tan castigados que bastará muy poco para hundirse, incluso con estas pendientes suaves. Por eso será importante saber dosificarse, porque además del Finestre, los corredores tendrán las piernas aún más cargadas por la etapa reina del Valle de Aosta del día anterior, sobre 5000 metros de desnivel.
Sestrière será meta de etapa por novena vez en la historia del Giro. Cuando los corredores crucen la línea de llegada, sabremos quién ha ganado el Giro d’Italia 2025.