El recorrido: Polvo fuiste -en Siena-; en polvo te convertirás -en Finestre-
Salvo por los primeros 10 kilómetros entre Verrès y Pont-Saint-Martin, todavía en el Valle de Aosta que acogió la brutal Etapa 19, todo el trazado de este sábado se desarrolla en la provincia de Turín. Los primeros 60 km son relativamente suaves, y tampoco es exagerada la primera cota en Corio (4ª categoría; km 69). Pero todo este terreno, los cien kilómetros exactos hasta Viù para comenzar el Colle del Lys (2ª categoría), son el necesario desgaste para que todo salte luego por los aires.
Como decíamos al inicio de esta previa, el Lys, con sus 13,7 kilómetros al 4,3% medio -rampas del 12%- mandará a los candidatos de la general las primeras indicaciones sobre si están para atacar o para guardarse. Porque esconderse no podrán hacerlo. Cuando el pelotón baje al valle de Susa y llegue a Meana –querido Mikel, ánimo y cuídate-, ya no habrá salvación posible. El Colle delle Finestre (Cima Coppi) es tremendamente constante y durísimo, la ascensión más exigente de todo el Giro 2025.
Con 18,5 km al 9,2%, Finestre se desarrolla en su segunda mitad (ocho kilómetros) sobre tierra. Además, en mitad de ese ‘sterrato’, se disputará el penúltimo Red Bull KM de esta edición, en Bergerie Le Casette, a 4,3 km de la cima. Cuando se corone a 2178m de altitud, se afrontará una rápida bajada hasta Pourrières y el último sufrimiento, la ascensión que, junto con Aprica, más ‘pupa’ hace en el Giro sin ser un puerto brutal, Sestriere, con sus últimos 10 kilómetros a poco más de un 4%… pero donde cualquier diferencia puede magnificarse, o cualquier fuga postrera ser neutralizada. Todo se decide en la Via Lattea.
