Lidl-Trek se fue muy golpeado de la jornada del sábado en tierras eslovenas. La pérdida de su gran referencia para la clasificación general, Giulio Ciccone, fue un golpe tremendo en los emocional, y también parecía restar alicientes a un equipo que, con la Maglia Ciclamino de Mads Pedersen prácticamente asegurada y cinco triunfos en la presente edición, hace tiempo que había cumplido todos los objetivos con los que podían soñar en este Giro.
Pero sucede que equipos así tienen alma, un corazón especial. Saber redefinir objetivos, como Carlos Verona explicó en la rueda de prensa tras su victoria en la Etapa 15 del Giro d’Italia 2025 en Asiago, es lo que hace a conjuntos de primer nivel volverse todavía más especiales. No era desde luego fácil rematar en una escapada como la que vio encumbrarse al de San Lorenzo de El Escorial, casi 40 ciclistas que llegaron a ser atrapados por muchos de los favoritos tras una nueva subida de locura al Monte Grappa.