Lo hemos tenido que esperar mucho, pero este año por fin hemos podido disfrutar de Wout Van Aert en el Giro d’Italia. Ya estaba previsto que acudiera a la cita en 2024, pero aquella maldita caída en la clásica A Través de Flandes obligó a posponer su presencia un año. Valió la pena, pues de Albania a Roma Wout supo regalar un espectáculo que solo un puñado de corredores en el mundo saben brindar con ese estilo inconfundible.

El crack belga de Visma | Lease a Bike cumple 31 años y es la ocasión perfecta para recordar y aplaudir lo que hizo en su primer Giro. De la Maglia Rosa que a punto estuvo de obtener en Tirana, a los grandes duelos con otro fenómeno como Mads Pedersen, pasando por las fugas, la generosidad y aquella acción de puro corazón después del Colle delle Finestre, para abrir el camino al triunfo Rosa de su compañero de equipo Simon Yates.

Y luego está, por supuesto, la victoria en Siena, en las rutas de la Strade Bianche, tras un espléndido duelo por las calles de la ciudad junto a la gran revelación de la prueba, Isaac Del Toro. Van Aert no ganaba desde nueve meses antes, pero con el ‘sterrato’ volvió a encontrar aquellas sensaciones y aquel instinto de ‘killer’ que buscaba desde hacía un tiempo. Su celebración en la Piazza del Campo se volvió icónica, con el abrazo, cubierto de polvo, a su hijo George y una sonrisa radiante iluminando Siena.

Wout ha ganado más de 50 carreras en su trayectoria, entre ellas etapas en todas las Grandes Vueltas, una Milano-Sanremo, una Strade Bianche, una Amstel Gold Race, dos E3 Harelbeke… y sin embargo, se tiene la impresión de que podría haber ganado más si no hubiera nacido en la misma época que fenómenos como Tadej Pogačar y su némesis Mathieu van der Poel, a los que siempre desafió cara a cara y sin miedo. Pero con victorias o sin ellas, Wout está destinado a seguir siendo uno de los corredores más queridos del ciclismo moderno. Una vez más, ¡feliz cumpleaños, Wout Van Aert!